La inflación de los más pobres ya superó el 50 por ciento
El Indec emitió el informe mensual con las canastas que miden la pobreza y la indigencia. Estos números impactarán en la próxima medición de pobreza, que es semestral.
Por Jonathan Raed - @JRaed Tiempo
Las canastas que se utilizan para medir los niveles de pobreza y de indigencia ya superaron la barrera del 50 por ciento de alza en los últimos 12 meses. Esto significa que los sectores más golpeados por la inflación son los de menos recursos.
En el informe publicado este jueves por el Indec, se establece que tanto
la Canasta Básica Alimentaria (CBA, se usa para medir indigencia) como
la Canasta Básica Total (CBT, pobreza) subieron en octubre un 7,5%. En
los últimos 12 meses, la CBA se fue a 51,5%, mientras que la CBT se
aceleró en un 54,6%. En ambos casos, el porcentaje supera al de la
inflación general medida por el Indec: 45,9%.
Durante 2018, la CBA llegó a 46,5%; la CBT, a 45,4%. En el mismo período, la inflación del Indec llegó a 39,5%.
Traducido
a pesos, estos números determinan que una pareja con dos hijos menores
de 10 años necesitan $ 9.735 para no ser indigentes y $ 24.241 para no
ser pobres. Si se agrega un tercer hijo, los valores se van a $ 10.239 y
$ 25.496, respectivamente. Un individuo, en tanto, necesita $ 3.150
para no ser indigente y $ 7.845, para no ser pobre.
Es el segundo mes
consecutivo con un número muy elevado en la variación mensual, ya que
en septiembre, ese porcentaje había estado por encima del 8% en ambas
canastas.
El legislador porteño por el FIT-PO, Gabriel Solano, opinó:
“La inflación actual impacta en los alimentos y en los productos
básicos porque son los más fáciles para aumentar. Son productos de
consumo necesarios como la leche, que la gente no va a dejar de
comprar”. Para Solano, la recesión frena un poco el traslado de precios
mayoristas a minoristas. “Comparada con el mayorista, fue muchísimo más
baja. Si todavía no se volvió más alta es por la caída de las ventas.
Entonces, el traslado a precios se aplica en productos que la gente no
puede dejar de comprar, que son los que integran las canastas de pobreza
e indigencia”, razonó.
Solano explicó que “la devaluación sigue
siendo el principal factor que impulsa la inflación” y que esto está
directamente ligado a la política económica de Cambiemos. “El
endeudamiento feroz, la desregulación de mercado financiero, la quita de
retenciones y el aumento de tarifas impactan de lleno en la inflación.
De hecho, los precios regulados son los que más aumentaron, según el
último informe del Indec. Esto es el aumento de transporte, tarifas,
alimentos, combustibles. El Gobierno sigue siendo el principal
responsable de la inflación”.
Finalmente, advirtió: “Cuando salga el
informe de pobreza, seguramente va a estar por encima del 30%. La
reducción de pobreza que hubo en 2017 duró un suspiro y sólo sirvió para
las elecciones. El salario subió en torno al 25-30% y la inflación va a
terminar en 50%. El bono que sacaron no sólo no alcanza, sino que no lo
reciben los más pobres porque son los que están en el mercado informal
de la economía. Los que están en negro no van a cobrar el bono. Todo
esto aa a repercutir en las mediciones de pobreza”.