“El siglo XXI va a ser el de América Latina”, afirmó Piñera.“Tenemos
grandes oportunidades y la misión de garantizar la calidad de vida de
nuestros pueblos, que es mucho más que crecimiento económico. Debemos
buscar un desarrollo integral con igualdad de oportunidades. Partimos
con diferencias de opinión, guiados por los principios de la libertad,
la democracia y los Derechos Humanos”, agregó. En su primera medida,
reclamó el apoyo de la organización para la postulación de la región a
la presidencia de la Organización Internacional del Trabajo (OIT). Poco
antes, había tenido que escuchar el reclamo de su colega boliviano, Evo
Morales, por “una salida al mar con soberanía”.
A su turno, el presidente uruguayo, José Mujica, dijo que “esta no es
una lucha por la utopía, es una lucha por ser o no ser”. Asimismo,
afirmó que “la integración es una proeza desafiante de nuestros
tiempos”. Insistiendo sobre el fino contorno de la nueva organización,
Mujica remarcó: “No debemos cometer el error del dogmatismo, acá deben
estar todos, derecha, centro e izquierda.”
A través del comunicado que respaldó el reclamo de soberanía argentina
sobre las Islas Malvinas, la debutante CELAC instó a “observar lo
dispuestos por la Resolución 31/49 de la Asamblea General de las
Naciones Unidas”. Del mismo modo, destacó la “disposición del gobierno
argentino para alcanzar por la vía de las negociaciones una solución
pacífica”, e instruyó a la nueva presidencia pro tempore a realizar las
gestiones correspondientes para el cumplimiento de esos objetivos. El
documento se conoció apenas unas horas después de que el gobierno de
Gran Bretaña anunciara sus disposición a conmemorar con festejos los 30
años del enfrentamiento armado entre los dos países, producido en 1982,
cuando la Argentina aún se encontraba bajo los designios de la dictadura
militar.
Entre los documentos firmados ayer, figura una “enérgica” condena al
bloqueo económico de los Estados Unidos contra Cuba. También un
pronunciamiento contra la especulación financiera, otro contra el
terrorismo y una declaración sobre los Derechos Humanos de los
migrantes.
En el seno de esta nueva organización, detrás de un objetivo regional y
amplio, tendrán que convivir intereses de países tan disímiles como
Brasil, con más de 190 millones de habitantes, y la República caribeña
de Trinidad y Tobago, con menos de un millón y medio.