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quedarían en la calle miles de empleados y muchas empresas quedarían 
complicadas", afirmó Weiss en declaraciones a Radio 10. “Ya hay 
telegramas de despidos en las empresas por los dichos de Milei. Las 
empresas emiten facturas con 60 días de antelación normalmente y están 
diciendo que no van a ejecutar más si no se les paga”, agregó. El 
dirigente empresario contó que mantuvo una reunión informal con 
Guillermo Ferraro, el próximo súperministro de Infraestructura del 
gobierno de Milei, pero no recibieron respuestas concretas.  
“Ferraro
 en KMPG, trabajó como consultor para empresas privadas y para la 
Camarco. Lo conocemos muchísimo en el sector. Tuvimos una conversación 
informal para comentarles la situación. Él no nos transmitió ningún 
mensaje concreto del futuro para ver si todo esto que se está diciendo 
públicamente va a ser así”, relató. Milei ratificó anoche su plan de 
frenar toda la obra pública y volvió a argumentar que "no hay plata". 
"La obra pública se termina, no tenemos plata. Hay que licitarla para 
que la haga el sector privado. Y si nadie quiere hacerla, significa que 
esa obra no tenía sentido desde el punto de vista económico y alguien va
 a tener que explicar por qué hicieron una obra que nadie quería hacer",
 se explayó el presidente electo. “Las obras van a tener que ser hechas 
por iniciativas privadas”, reafirmó en una entrevista en la que también 
habló de privatizar Aysa y los ferrocarriles argentinos.
Weiss: "No 
son muchas las obras públicas que tengan rentabilidad para que el 
privado se interese" Para Weiss, si Milei concreta sus planes, habrá un 
“crack muy importante” en la economía al paralizar “3.500 obras que 
están en ejecución en todo el país con fondos nacionales”, y que emplean
 “300.000 personas que pasarían a la calle”. Además –advirtió- “muchas 
empresas van a estar muy complicadas y al borde del concurso de 
acreedores”.
La paralización también afectará al trabajo indirecto 
porque “si la obra pública desaparece, afectará también a las fábricas 
de insumos”, consideró el dirigente empresario. Para el titular de la 
Camarco “no son muchas las obras públicas que tengan rentabilidad para 
que el privado se interese”, lo cual augura “un futuro complicado”. “No 
tuve la oportunidad de hablar con Milei sobre este tema, pero lo que él 
transmite en su mensaje es que, si los municipios y las provincias no 
tienen dinero, van a tener que conseguir un privado que se interese en 
hacer la obra. Eso en el mundo no supera el 7% a 10% de la inversión 
total porque no hay negocio para el sector privado”, concluyó Weiss.

