Sin embargo, el equipo económico quiere algo más. En rigor, según pudo
saber Ámbito, considera que debe hacerse de un respaldo estructural para
el mercado de deuda, una promesa de que el Tesoro estadounidense
arbitrará los medios necesarios para sostener el precio de los bonos
soberanos. Se trata de una ecuación que busca ponerle un techo a la suba
del riesgo país. Esta movida cobra relevancia tras la intervención del
Tesoro argentino en el Mercado Único y Libre de Cambios (MULC) por unos
u$s400 millones en la jornada de ayer, para evitar que el tipo de cambio
mayorista perforara la banda superior, en un día donde los dólares
paralelos cayeron 1,5% y el blue retrocedió 10 pesos a $1.450. El foco
principal de las conversaciones no se limita, entonces, a consolidar el
canje de divisas, el swap, por unos 20.000 millones de dólares, que
actuaría como un colchón de liquidez inmediata para las reservas del
Banco Central, siempre y cuando se cierren las condiciones necesarias
para que el BCRA pueda utilizar ese crédito. Se discutirá duración,
tramos y tasas de interés del swap, además de la restricción para usarlo
en pagos de importaciones. Cómo intervendría el Tesoro de Estados
Unidos De todas formas, el objetivo del equipo económico es avanzar en
aquella solicitud. Creen que en la previa electoral, el Tesoro de
Estados Unidos debería asumir un rol activo como jugador del mercado de
bonos soberanos argentinos. Esto implicaría intervenciones directas en
el mercado secundario, como recompras selectivas de títulos para
absorber oferta y contener la presión vendedora, o incluso adquisiciones
en el primario que ayuden a reducir el stock de deuda sin generar
mayores desembolsos. La idea es clara: sostener los precios de las
emisiones hasta las elecciones legislativas, evitando un rebrote de la
curva de rendimientos que podría complicar el panorama electoral y
agravar la brecha con los bonos globales.
Esta pretensión no surge de
la nada. Forma parte de las iniciativas que el propio Bessent delineó
-a instancias de algún miembro relacionado con el equipo económico- como
parte de una estrategia para respaldar la estabilidad financiera,
siempre alineada, de aquél lado, con intereses geopolíticos más amplios.
La expectativa es que el presidente Donald Trump y su par Javier Milei
puedan anunciarlo el próximo 14 de octubre cuando se reúnan en la Casa
Blanca.