"Uno de los principales problemas con las cooperativas es que pagan muy
caro, porque les tienen que pagar a Telefónica o a Telecom precios
abusivos por el servicio de ancho de banda e internet, hasta 100 veces
lo que pagan los grandes", detalló.
Al respecto, indicó que el
precio de un megabyte en el mercado mayorista puede alcanzar 2000
dólares, mientras que "en las grandes urbes se paga 20 dólares". "Les
ponen esos precios abusivos para ahorcarlas", señaló.
Bajo los
nuevos parámetros, cerca de 350 pymes y cooperativas tendrán la
obligación de abrir sus redes de cable a grandes compañías. A su vez,
afirma Garbarz, los grandes también deberán abrirse.
En su
opinión, esa decisión representa "que el Estado les abra la compuerta" a
las pequeñas empresas para "llegar a miles de usuarios con los mismos
equipos".
"No necesitan hacer grandes inversiones, lo que necesitan es que el Estado les abra la compuerta", añadió.
Además,
precisó que las redes de telefonía fija fueron adquiridas por las
empresas "en condiciones de monopolio", lo que eventualmente permitiría
al Estado aplicar una jurisprudencia según la cual las redes obtenidas
en base a rentes monopólicas "pasarían a ser propiedad del Estado
nacional".
Por otro lado, expresó que "están equivocados" quienes
piensan que el grupo Clarín se verá favorecido por la nueva ley. Si
bien "las empresas que prestan servicios satelitales quedan exceptuadas
del derecho de prestar telefonía (DirectTV, Telefónica y Telecom)",
también se establece que las condiciones de la ley son "independientes
del tipo de tecnología que utilicen". Según el especialista, esto
impediría a empresas del grupo proveer el servicio de telefonía.
Garbarz
consideró que la ley es "brillante y revolucionaria" porque "convierte a
las telecomunicaciones en un derecho humano". "Que yo esté en un
pequeño pueblo con un pequeño transmisor no me va impedir que llegue al
resto de los argentinos", concluyó.