“Los afectados son pobladores de barrios rurales como Tablita, Matadero y
Chaquito y los parajes afectados fueron Tala, Amará Picada y Palmita,
que quedó incomunicada por vía terrestre”, sostuvo Lammens.
En
Perugorría, el desborde se debió a los caudales afluentes del río
Corriente, lo que desbordó el caudal y provocó además la inundación de
dos de las tres arroceras que tienen plantaciones con represas de riego
en la zona.
En Santa Lucía, sobre la ribera del río Paraná, hay
unos 400 evacuados que permanecen en las escuelas 75, Normal y del
barrio La Estancia, debido a un desborde que comenzó a bajar ayer aunque
la mayoría de las viviendas permanecen con agua.
“Esta tarde la
Dirección de Defensa Civil fumigará las casas donde se retiró el agua,
porque el problema ahora es la humedad y las alimañas que hacen
inhabitable los barrios mas afectados”, dijo a Télam el vocero
municipal, Federico Peralta.
En esa localidad de la provincia, a
200 kilómetros de la capital, el río registra una bajante, aunque muy
lenta y que se podría revertir en caso de que se cumpla el pronóstico de
lluvias que está previsto para los días jueves y viernes.
En
tanto, hoy el municipio de Goya informó a través de un comunicado que en
el paraje Maruchitas de la zona rural debieron ser asistidas 17
familias afectadas por la creciente de lagunas y arroyos, agravadas por
la rotura de un puente alcantarilla.
A través de un operativo
encabezado por el intendente Gerardo Bassi (FPV) se brindó asistencia
médica y alimentaria y se entregaron medicamentos.
Además, en
Santo Tomé, a 350 kilómetros de la capital sobre la costa del río
Uruguay, una decena de familias debieron ser evacuadas a la escuela del
barrio Sarmiento.
Aunque hoy se estacionó, en las últimas horas
el río Uruguay experimentó un repunte que alcanzó los 12,78 metros,
según el registro de este mediodía efectuado por la Prefectura Naval
Argentina, que ubicó a ese puerto correntino por encima del nivel de
evacuación.
Otras localidades afectadas por la creciente del
Uruguay son La Cruz, Alvear, Garruchos y Paso de los Libres, a 400
kilómetros de la capital, donde debió interrumpirse el tránsito de la
avenida costanera debido al desborde del caudal.