José Luis Chilavert, ex arquero del seleccionado guaraní había dicho que
el ex Newell’s no había trabajado del todo bien en las juveniles y que
el recambio sería complicado. Tal vez haya sido la falta de nuevos
talentos lo que llevó a Paraguay a no haberse clasificado a Brasil 2014 y
no encontrar el camino con permanentes cambios de entrenador.
Díaz,
para Chile 2015 echa mano a una mezcla de jugadores de escasa
experiencia y otros que ya están dando sus últimos pasos como
profesionales, como Justo Villar, Oscar Cardozo, Roque Santa Cruz, Lucas
Barrios y Néstor Ortigoza, estandartes de la última generación exitosa
de Paraguay.
Si bien el riojano gusta de un fútbol ofensivo y
hasta vistoso, el dos veces campeón de América (1953 y 1979) intentará
ser protagonista con las armas que supieron traer el éxitos. Juego
aguerrido, juego aéreo, férrea defensa y mucha presión.
El 16, en
el mismo escenario, la Argentina deberá enfrentar a Uruguay, el
defensor del título, que continúa bajo las órdenes de Oscar Washington
Tabárez y que, también en un escenario de recambio generacional, buscará
demostrar que sigue siendo un hueso siempre difícil de roer.
Tal
vez sin un juego vistoso, pero con futbolistas experimentados y de
elite, que se mezclan con jóvenes valores, Uruguay propondrá un juego
ríspido y de velocidad y contundencia a la hora de atacar.
No
contará con su máxima figura, Luis Suárez, suspendido por la FIFA por
morder al italiano Giorgio Chiellini en el Mundial de Brasil, pero el
talento y la capacidad goleadora de Edinson Cavani parecen ser los
“anchos” bajo la manga del “Maestro”.
Al delantero campeón con el
Paris Saint Germain habrá que agregarle la seguridad bajo los tres
palos del argentinos nacionalizado Fernando Muslera, el coraje y la
seguridad de Diego Godín, una garantía aérea en defensa y en ataque y
las brillantes apariciones de Carlos Sánchez, Giogian de Arrascaeta y
Nicolás Lodeiro, un futbolista de mucho rodaje internacional, pero
“tapado” por la era Diego Forlán como conductor del equipo.
Por último, el 20 en Viña del Mar, Argentina enfrentará al, a priori, más débil del grupo: Jamaica.
Dirigidos
por el alemán Winfried Schäfer, los “Reggae Boys” buscarán ser la
sorpresa del torneo, liderados dentro del campo de juego por el defensor
Wes Morgan, su capitán, que milita en el Leicester City de Inglaterra.
El
único antecedente oficial entre ambas selecciones es el 5 a 0 en el
Parque de los Príncipes en París por la Copa del Mundo Francia 1998. Los
nombres de ambos equipos en la actualidad, nada tienen que ver con los
actuales.
Los caribeños intentarán refugiarse en defensa y
sorprender de contra, con jugadores rápidos. Se puede esperar cierta
fragilidad táctica, teniendo en cuenta que ninguno de sus jugadores
milita en equipos importantes del mundo y, salvo contadas excepciones,
la mayoría juega en ligas de segundo y tercer orden global como la
noruega, la norteamericana y la sueca.