Más temprano, la abogada había expresado a radio Del Plata que “el grupo
Clarín notificó a la Comisión Nacional de Valores que la compra la hizo
otro licenciatario de comunicaciones, que es Cablevisión, con lo cual
serían dos empresas licenciatarias las que le informan al Estado que no
han cumplido una ley”.
“Imagino que la información tiene que ver
con el cumplimiento de instancias de países como Estados Unidos, pero no
es conforme a las leyes argentinas”, insistió.
La funcionaria
explicó que “Clarín hoy tiene la mitad de Nextel más una opción de
compra para quedarse con la mayoría, lo cual implica el uso de
frecuencia para hacer comunicaciones móviles”.
A eso, añadió, se
agregan las redes físicas de Cablevisión, el tendido de fibra óptica más
importante del país en términos privados; más la sociedad con Fintech,
que compró todo el paquete accionario de Telecom Argentina, con lo cual
maneja los tendidos de redes físicas y los de redes móviles de Personal
(marca del servicio de telefonía celular).
“Lo problemático acá
es el tema de concentración de redes que se da, lo cual habilitaría la
intervención de la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia”,
evaluó Peñafort.
“Esta compra -concluyó- debería pasar al menos
por tres organismos que regulan aspectos distintos: por un lado la
Aftic, desde la perspectiva de telecomunicaciones; Defensa de la
Competencia; y el Afsca, que tiene que controlar lo relativo a los
servicios de comunicación audiovisual”.