Y en ese sentido, aportó: “El 1 por ciento de la población concentra el
50 por ciento de la riqueza a nivel global. ¿Cuánto tiempo puede
sostenerse un mundo con tanta inequidad?”.
En tanto, la jefa de
Estado agradeció a la Asamblea de la ONU por la aprobación de los nueve
principios para reestructurar deudas soberanas impulsados por la
Argentina, al dar su discurso ante la 70º Asamblea General de Naciones
Unidas con sede en Nueva York.
La mandataria consideró como el
"primer intento serio de razonabilidad y regulación al sector
financiero" a los nueve principios aprobados por la ONU que dan marco a
un sistema legal global para los procesos de reestructuraciones de deuda
soberanas.
"Es un avance importantísimo que debe ser
consecuente", resaltó Cristina al hablar ante la Asamblea General de
Naciones Unidas, donde volvió a apuntar contra el "hostigamiento" que
sufrió la Argentina por parte de los fondos buitre y alertó sobre la
"complicidad de cierto sector judicial" estadounidense.
A la vez,
dejó en claro que "esta aprobación, que ya tiene antecedentes en el
mundo, significa no una ayuda a la argentina, sino al resto del mundo".
En
el último discurso de su mandato ante la ONU, Cristina tomó la palabra
después del presidente de Zimbabwe, Robert Mugabe, y antes de su par de
Bielorrusia, Alexander Lukashenko, a las 19.15 (hora argentina).
La
jefa de Estado está acompañada en el recinto por el canciller Héctor
Timerman; la jefa de la misión argentina en la ONU, Marita Perceval; el
secretario Legal y Técnico, Carlos Zaninni; el ministro de Economía y
Finanzas, Axel Kicillof; el titular de la Agencia Federal de
Inteligencia, Oscar Parrilli; y la embajadora en Estados Unidos, Cecilia
Nahón.
El discurso de la Presidenta ante el pleno del organismo
internacional se da dos semanas después de que una abrumadora mayoría
apoyara en asamblea la iniciativa argentina para regular la
reestructuración de deudas soberanas.
Ayer, exhortó a “derrumbar
tabúes y prejuicios” para terminar con la discriminación hacia las
mujeres durante un discurso pronunciado ante altos mandatarios en una
reunión sobre igualdad de género realizada en el marco de la 70º
Asamblea General del organismo con sede en Nueva York.