Para el titular de la AFSCA, Martín Sabbatella, "el balance es altamente
positivo porque, más allá de la resistencia de grupos concentrados como
Clarín, la ley generó la democratización de la palabra y que se
escuchen nuevas voces porque hoy podemos decir que lo diverso, lo
plural, lo multicolor está en el mapa de medios de nuestro país".
"La
ley es hija de una historia de lucha política de 30 años y del momento
histórico que impulsó Néstor (Kirchner) y retomó Cristina, que es la
interpelación al poder concentrado para ampliar la frontera de lo
posible", destacó Sabbatella en diálogo con Télam y advirtió que "a
partir del la ley pero también a partir del debate que impulsó, cuando
los argentinos encendemos la televisión o la radio, sabemos que no nos
enfrentamos a 'la verdad' sino que nos encontramos con alguien que habla
desde algún lugar".
La ley que reemplazó al decreto-ley 22.285,
que databa de la última dictadura cívico-militar, está atravesada por la
resistencia del grupo Clarín que presentó una medida cautelar en la que
planteaba la inconstitucionalidad de los artículos 41,45, 48 y 161
referidos a la adecuación que debían llevar a cabo.
Ese camino
judicial encontró un límite el 29 de octubre de 2013 cuando la Corte
declaró la constitucionalidad de todos los artículos de la ley, llevando
a todos los grupos mediáticos a cumplir con una norma que tuvo que
esperar cuatro años para ser constitucionalmente plena.
"La ley
no fue hecha para el grupo Clarín pero hablamos mucho de ese grupo
porque es el que más excedido estaba y el que más ha resistido la
adecuación a esta norma de la democracia", sostuvo Sabbatella y agregó
que "esto fue posible por la complicidad de gran parte del partido
judicial que o por miedo a sus prácticas extorsivas o por simple
complicidad, permiten que ese grupo se mantenga por fuera de la ley".
Entre
las novedades que plantea esta norma se destaca la participación de
organizaciones sin fines de lucro por primera vez en los concursos para
adquirir licencias de TDTA (Televisión Digital Terrestre Abierta), según
lo establece la nueva Ley y en contraposición a la norma anterior, en
la que se establecía expresamente que los integrantes de ese sector no
podían acceder a licencias de medios.
De este modo, por primera
vez en la historia de la televisión argentina se realiza la adjudicación
de licencias de televisión abierta para el sector sin fines de lucro y
se aprobó la adjudicación de un servicio de TV digital abierta en
Formosa para la Cooperativa de trabajo Construcción y Progreso Limitada,
otro en CABA para la Fundación UOCRA para la Educación de los
Trabajadores Constructores, y uno en Tucumán para la Asociación de
Prensa de Tucumán.
Pasados seis años de la promulgación, además
son más de 55 las frecuencias de FM de los pueblos comunitarios, 278 las
radios a escuelas públicas, institutos educativos y centros juveniles,
80 las autorizaciones a radios de gobiernos provinciales, municipales y
comunales, 44 las radios de la iglesia católica, y 717 radios AM y FM
del sector privado.