El contenido votado coincide con el proyecto enviado al Parlamento por
el Ejecutivo, que concibe al desarrollo satelital como política de
Estado y define un Plan Satelital Geoestacionario Argentino para el
período 2015-2035.
"Es una ratificación de lo hecho según el
estatuto de Arsat, creada para proteger las posiciones orbitales con
satélites hechos en Argentina, y permite seguir adelante con la
industria satelital definida como prioridad y política de Estado", dijo
Bianchi en diálogo con Télam.
La ley prohíbe la transferencia de
cualquier parte del 51 por ciento de las acciones clase A que el Estado
argentino posee en Arsat "sin previa autorización expresa de los dos
tercios de los miembros del Congreso de la Nación".
La iniciativa
se aprobó sin debate debido a que el oficialismo decidió aprobar todo
el paquete de proyectos en una sola votación después de que la oposición
decidiera retirarse del recinto, al objetar el mecanismos de
designación de dos auditores de la Auditoría General de la Nación.
Si
bien el radicalismo, la Coalición Cívica, y el socialismo acompañaban
la iniciativa y ayer respaldaron el despacho de comisión, hoy se
ausentaron cuando se planteó la controversia sobre si correspondía o no
tomar juramento a Julián Álvarez e Ignacio Forlón.
El plan apunta
a la explotación de satélites pequeños y medianos para un mercado
creciente en demanda de capacidad de transmisión, e incluye al "Arsat 3
para el que está previsto el lanzamiento interno en unas semanas, con el
60 por ciento de los contratos firmados", informó Bianchi.
Para
alcanzar una nueva plataforma satelital geoestacionaria de
telecomunicaciones con mayor potencia de carga útil -como evolución de
la actual plataforma de los Arsat 1 y 2, puestos en órbita en 2014 y
2015-, "empezamos con la mejora tecnológica", anunció.
La mejora
consiste en obtener más potencia con menos peso para poner en el
espacio, lo que supone "cambiar la propulsión química por energía
eléctrica" en los satélites, contó.
Con el poder de compra
estatal, el área satelital procura el desarrollo de industrias
proveedoras y el incremento de valor agregado nacional en las etapas de
diseño, fabricación y operación del servicio.
Asimismo, Arsat
tramita "aspectos regulatorios con la Organización Internacional de
Telecomunicaciones para postular nuevas posiciones orbitales" para
Argentina, afirmó el ingeniero.
La industria satelital argentina
fue consolidándose con el entrenamiento técnico a partir de los
satélites de observación terrestre de la Comisión Nacional de
Actividades Espaciales, el desarrollo y la fabricación en la empresa de
soluciones tecnológicas Invap -y el posterior laboratorio de ensayos
Ceatsa- y la creación en 2006 de Arsat, en conjunto con el sistema
científico tecnológico argentino de excelencia.