Pero los datos dicen los contrario: entre diciembre de 2015 y septiembre
de este año (último dato disponible), se perdieron 8.744 puestos de
trabajo registrados solo entre el sector agropecuario y el minero. Si se
lo compara con septiembre del año anterior, la merma es de 8.664
empleos en blanco.
Según los datos del SIPA, que difunde el
Ministerio de Trabajo, en los primeros 10 meses de gobierno el campo
destruyó 3.876 empleos en blanco y la minería, 4.868. En el último año,
la destrucción de empleo fue a razón de 2.168 puestos privados en el
agro y ganadería contra 6.499 del sector minero.
La minería
cayó durante todo el año demostrando que la quita de retenciones estuvo
lejos de generar más trabajo en ese sector. El campo, por cuestiones
estacionales tuvo sus picos de empleo durante la siembra y cosecha de
soja, que fue en marzo, cuando llegó a más de 330 mil personas
trabajando en blanco en ese sector. En la actualidad, poco más de 80 mil
son las que se dedican a la minería, cuando eran algo más de 85 mil las
que había en enero de este año.