El funcionario justificó la decisión del gobierno provincial en que
“tenemos vino en toda la región y las importaciones dificultan obtener
un buen precio, que es lo que peleamos siempre con los viñateros”.
Díaz
Cano dijo que “San Juan va a tener que salir, al igual que lo está
haciendo Mendoza, a velar por nuestra industria regional, porque la
ayuda que esperábamos de gobierno nacional no va a llegar”.
El
ministro sanjuanino recordó que el secretario de Comercio Exterior,
Miguel Braun, le dijo esta semana a las entidades vitivinícolas
sanjuaninas y mendocinas que “ellos no harán nada para frenar la
importación, porque no se condice con la política del gobierno nacional
de abrir a Argentina al mundo.
Indicó que “eso va en desmedro de
la economía provincial, porque tenemos un stock importante de vino en la
región” y que “entendíamos que el apoyo de la Nación debería haber sido
no dejar entrar el vino o poner una medida restrictiva, como se hace en
cualquier país del mundo”.
En San Juan, el Poder Ejecutivo está
facultado por la Cámara de Diputados para aplicar un nuevo gravamen a la
importación de vinos porque sancionó una habilitación por ley para eso
hace dos semanas.
El ministro Díaz Cano aseguró que “se hará uso
de la normativa para gravar el fraccionamiento en San Juan de los vinos
importados, porque la importación afecta directamente a la producción”.