"Como pastores deseamos hacer un nuevo llamado al diálogo. Para
responder a las muchas urgencias y angustias de nuestros hermanos más
frágiles, especialmente los jubilados, y para construir una sociedad
justa y equitativa, no existen dos caminos, el diálogo o la violencia,
solamente hay uno, el diálogo", señaló el Episcopado, que preside el
obispo de San Isidro, monseñor Oscar Ojea.
A través de un comunicado,
los obispos advirtieron: "En estos días las familias argentinas han
sido conmovidas por una creciente violencia política, que no solo se ha
registrado en las calles, sino que ha llegado incluso al interior del
Congreso impidiendo su normal funcionamiento".
Y a partir de eso
realizaron "un nuevo llamado al diálogo", al tiempo que señalaron que
"únicamente a través del respeto por las instituciones democráticas, que
garantizan un diálogo al servicio del bien común, será posible superar
las dificultades que agobian a nuestro pueblo".
"Exhortamos a todos a
multiplicar los esfuerzos necesarios para poder celebrar estas próximas
fiestas de Navidad en paz, e invocamos la protección de María
Santísima, Nuestra Señora de Luján, sobre cada uno de los argentinos",
subrayaron.