De esta manera, el próximo paso le corresponde a los síndicos, quienes
deberán incautar y liquidar los bienes de las empresas y las personas
particulares vinculadas a las firmas. Con esto, se busca conseguir el
dinero para responder a los acreedores, quienes no llegaron a un acuerdo
en las instancias previas son el Banco Galicia, y Campinox.
Asimismo
trascendió que las demás personas particulares y empresas que se puedan
presentar a concurso tendrán tiempo hasta febrero de 2020.
Humberto
Lucaioli fundó hace 58 años una casa de electrodomésticos que fue
creciendo y se convirtió en una cadena con fuerte presencia en el
interior del país, en especial en la zona centro y sur, en provincias
como Chubut, Río Negro, Neuquén y Bahía Blanca. La empresa llegó a tener
2.000 empleados y hace tres años comenzó un fuerte proceso de ajuste.
En
2016, Lucaioli despidió a 75 trabajadores, en 2017 cerró su local de
Bariloche y cesanteó a todos los empleados. Mientras en 2018, sólo en
Bahía Blanca dejó sin trabajo a 60 personas. Primero empezaron a cobrar
su salario en cuotas y en febrero, la empresa dejó de pagar las
indemnizaciones a los empleados que habían sido despedidos en 2017.
Hay
una porción de los trabajadores que no fue cesanteado pero que no cobra
desde abril y no sabe qué será de su futuro. "Lucaioli está en un
concurso preventivo. Por el momento no han acompañado las propuestas y
se presupone que la empresa va a entrar en quiebra", explicaba hace unos
días Martín Ciccola, el letrado a cargo, al Diario Río Negro. "Los
empleados necesitan que se les aclare la situación, es decir, que la
empresa les confirme si van a pagarles y si van a brindarles ocupación
efectiva", agregó el abogado, quien aseveró que hay un grupo de
empleados que pretende ir a juicio.