El encarecimiento de la carne vacuna en la Argentina fue reflejado en el
relevamiento de precios minoristas realizado por el Ipcva (Instituto de
Promoción de Carne Vacuna Argentina).
En relación al resto de las
carnes que conforman mayormente la dieta de los consumidores nacionales,
“el pollo fresco también mostró alzas significativas en el último mes
del año, del 19,1% mientras que en pechito de cerdo los ajustes fueron
más moderados, 4,4% por sobre el mes anterior”, agregó el informe
semanal de Rosgan. En comparación con los valores de diciembre de 2019,
añadió la entidad, “el pollo incrementó su precio un 57,9% y el cerdo un
59,3%, unos 15 puntos menos en relación a los cortes de carne vacuna”.
En
cuanto a la oferta, de acuerdo con los datos provisorios publicados por
el RUCA (Registro Único de Operadores de la Cadena Agroindustrial),
durante diciembre se habrían faenado 1.214.266 bovinos, nivel muy
similar al registrado en noviembre, aunque con menor cantidad de días
hábiles.
Con este registro la industria cerró 2020 con una faena
anual de más de 14 millones de animales, “la cifra más elevada de los
últimos 11 años, tras la última gran liquidación de 2007 a 2009”. El
informe de Rosgan destacó además que el índice de precios de la carne
elaborado por la FAO (organización de Naciones Unidas para la
Alimentación y la Agricultura) alcanzó un promedio mundial de 95,5
puntos en 2020, lo que representó una disminución de 4,5 puntos respecto
de 2019. A nivel global, entre las distintas categorías del producto
los precios de la carne de aves de corral registraron la caída más
pronunciada, seguidos por los de las carnes de ovino, porcino y bovino.
En
tanto, el Índice de precios de los alimentos, que incluye además de la
carne, mediciones en cereales, aceites vegetales, productos lácteos y
azúcar, con un promedio de 97,9 puntos, alcanzó en 2020 su nivel más
elevado en tres años registrando un incremento del 3,1% respecto de
2019, concluyó el Rosgan al replicar datos de la FAO.