. Un hombre se sobresaltó ante el ingreso de un agente identificado con
la campera de la Aduana, organismo que ha funcionado como fuerza de
choque para intentar atacar el mercado informal y que había anunciado
operativos en la zona, y salió presuroso del establecimiento, de forma
sospechosa. Abandonó la mochila que llevaba con dinero en su interior.
Cuando la abrieron había unos u$s 20 mil y un millón de pesos, en
efectivo. También tenía anotaciones con lugares de entrega y dos
direcciones. Con esos indicios, el juez federal Marcelo Martínez de
Giorgi autorizó los allanamientos que estuvieron a cargo de la Policía
Federal y de la Aduana. Para quienes analizaron los elementos que
acumuló la causa en pocas horas, el escándalo que puede destaparse
podría hacer empalidecer lo que fue la revelación de la mesa de dinero
que se le descubrió al BNP Paribás. Las derivaciones exceden las
fronteras y alcanzan a los Estados Unidos, adonde existía un servicio de
apertura de cuentas offshore.
La causa se encuentra en manos del
Juzgado Federal N°8, a cargo de Marcelo Martínez de Giorgi. La acusación
en contra de los vendedores es por violación del Artículo 303 del
Código Penal, que castiga delitos financieros.
¿Cómo fue el arresto
de los tres "arbolitos"? "Nimbus", la cueva del croata Pero lo relevante
de Sarmiento 140 -una dirección para nada secreta en el mercado
informal de divisas- fueron los hallazgos, según pudo reconstruir este
medio. “Nimbus” es el nombre de fantasía de esa “cueva”. Pero el nombre
que surgió detrás de esas oficinas fue el del “croata” Ivo Esteban
Rojnca, quien realmente las utilizaría y es considerado el principal
operador de blue de la City. La puerta estaba cerrada y no había nadie
en el interior. Apareció el abogado de Rojnca y por un momento se pensó
en que no habría necesidad de romper la puerta. “El Croata” anunció que
no concurría ante el temor de quedar detenido. PFA volteó la puerta.
Adentro
de un amplio espacio con escritorios, computadoras y estaciones de
trabajo que fueron requisadas se encontraron elementos de prueba que
fueron secuestrados: apuntes manuscritos con detalle de operaciones
cambiarias, máquinas contadoras de billetes, bolsos de distinto tamaño
(vacíos), valijas, y máquinas trituradoras de papel con documentación
destruida. Pero lo más llamativo fueron fajas para permitir adherir al
cuerpo los billetes y las mismas fajas que se le encontraron a los
chinos apresados, que daban también indicios bancarios de las
extracciones de pesos. Pero lo que más llamó la atención a los
investigadores -que con eso solo ya habían unido los dos tramos de la
causa- fueron una serie de carpetas naranjas, con membretes y
documentación que certificaba la apertura de cuentas en el exterior. Por
los datos contenidos, Argentina está en condiciones de cursar su aviso a
la FINCEN, el organismo antilavado de los Estados Unidos. Los papeles
simulaban los formularios para la declaración de origen de fondos. Es
una historia en desarrollo. En el marco del operativo, encontraron a los
tres sospechosos, que al ver los efectivos se pusieron visiblemente
nerviosos y empezaron a palparse las cinturas como si portaran armas. En
ese momento fue que los oficiales detuvieron a las tres personas y les
encontró una gran cantidad de fajos pegados a sus cuerpos, con lo que
conformaba una especie cinturón de fajos termosellados. Se calculó que,
entre los tres vendedores, acumulaban cerca de medio millón de dólares.
Los detenidos todavía no fueron identificados ya que no contaban con sus
documentos de identidad. Además, ninguno de ellos habla español y no se
sabe si su situación migratoria es regular.