"Por ahora, no nos une el espanto, nos une el ajuste", se sinceró ante
PáginaI12 uno de los laderos económicos del líder libertario, con una
sonrisa de gusto a poco para estar a horas de asumir la responsabilidad
central de un país en situación compleja. Cuentan los que trabajan con
el flamante ministro de Hacienda, Luis "Toto" Caputo, que al
exfuncionario de Macri no le cayó para nada bien que el futuro ministro
del Interior, Guillermo Francos, le pusiera un valor al dólar a través
de los medios. Sobre todo si ese valor supone una devaluación del 100
por ciento. "Entre 600 y 650 pesos podría ser un valor razonable del
dólar oficial", dijo el exCorporación América y BID en una entrevista
televisiva, y pidió "estar tranquilos con el dólar" porque "no hay
motivo por el cual hubiera una disparada". Esa declaración salió al aire
horas después de que Francos y los ministros de Milei, incluido Caputo,
estuvieran reunidos en el bunker del Hotel Sheraton Libertador. Esto
último de que no habrá una disparada es lo que más inquietó a Caputo: no
porque su idea no sea devaluar, sino porque efectivamente habrá un
sacudón muy fuerte, que se irá a precios de alimentos y energía. "Toto"
tuvo, incluso, un deja vu con el inicio del gobierno de Macri: en aquel
entonces, Alfonso Prat Gay, primer ministro de Hacienda PRO, le dijo al
presidente que abrieran el cepo cambiario porque los precios ya estaban
al valor del dólar paralelo. ¿Qué pasó? Primero subieron por el dólar
blue y, después, volvieron a subir con la devaluación pre cepo. En este
contexto, además, vale recordar que Caputo es enemigo de sacar los
controles cambiarios el día uno, por lo cual tampoco tendría mucho
sentido una devaluación sin acceso al mercado oficial.
Un hombre de Cabrera, para liberar precios
Para
las consultoras, la inflación de diciembre se calcula en una base de 18
o 20 por ciento siempre y cuando la devaluación sea del 50 por ciento,
pero Francos avisó que será más cercana al 100 por ciento. A esa
devaluación del dólar oficial hay que sumar que el proceso de liberación
de precios o, como lo llaman en el gobierno entrante, corrección de
precios relativos, ya está produciendo subas arriba del 100 por ciento
en alimentos y bebidas de góndola.
Sobre este escenario se da la
casi confirmada llegada de Pablo Lavigne a la secretaría de Comercio.
Este cuadro, que responde a Francisco "Pancho" Cabrera, exministro de la
Producción de Macri, viene manteniendo reuniones casi diarias en la
transición con su antecesor, Matías Tombolini.
Su currículum es
extenso, como se verá a continuación, pero el dato más saliente es que
trabajó con Cabrera en el proceso de apertura de importaciones. Sus
inicios fueron como economista en la consultora Datarisk y luego en
Empiria, la firma del ex-ministro Hernán Lacunza. De vieja data en el
PRO, supo coordinar Lavigne la parte macro de la Fundación Pensar, el
think tank de Mauricio Macri. Hoy, según supo este diario, llega para
desmantelar los acuerdos y ser garante de aumentos libres por parte de
las empresas.
¿Cómo se hace sin dólares?
En paralelo, los cuadros
de La Libertad Avanza que quedaron afuera del organigrama y hasta de la
asesoría, empezaron a disparar munición gruesa a Milei y a Caputo por
lo inconsistente del armado de Hacienda. El más elocuente fue el
exmenemista Carlos Rodríguez, que desde su cuenta social X realizó una
más que lógica explicación de por qué los dólares blue y financieros
pasaron de una calma casi total a subas muy fuertes, en cuestión de
horas.
"(Milei) estuvo 6 meses de campaña vendiendo espejitos de
colores y salió elegido. Ahora quedan diez días. No hay billones de
dólares para dolarizar, no hay gabinete en las sombras. Es hora de
despertarse", expresó. Y a continuación apuntó que "al final, además de
buenos deseos, se consiguieron dólares? Parece que vamos a tener que
arreglarnos solos, lo que me parece muy bien. Lo que me pregunto es si
Milei tiene un plan y gente adecuada para eso...".
La crítica a
Caputo fue dura pero con algo de evidencia: las mismas fuentes del Fondo
Monetario (FMI) le dijeron al exDeustche y JP Morgan que el organismo
no hará otro desembolso de 20 mil millones de dólares, y que a lo sumo
puede aportar entre 2000 y 3000 millones de DEGS o a través del fondo
verde. Ese dinero no sólo no sirve para dolarizar, sino que tampoco
frena una corrida al dólar producto de un plan de salida de las Leliqs.
Por
esta razón, cuentan en LLA, también se alejó el otro exfuncionario
cavallista que jugaba de asesor, el exministro Roque Fernández. Caputo,
hasta el momento, logró aglutinar críticas por derecha e izquierda. Sin
embargo, cuentan en su entorno, la alternativa de conseguir fondos
"sigue estando firme".
Retenciones: Vilella quiere bajar, Caputo no
Fernando
Vilella, que en breve será designado secretario de Bioeconomía, nombre
que reemplazará a Agricultura, le mandó hace unos días a empresarios del
agro una invitación para una reunión la que quiere llevar tranquilidad
ante pedidos varios que viene recibiendo. El encuentro, intitulado
"Alineando intereses, el futuro del agro y sus políticas de Gobierno",
se hará en el local Casa Guerrero, ubicado en San Telmo. En la
invitación, Vilella aclara que la idea es "co crear" con el sector
privado en materia de campo y agro.
El personaje en cuestión estuvo
la semana pasada en Maizar, la asociación que reúne a los productores de
maíz y trigo, y se llevó un reclamo natural: la necesidad de bajar las
retenciones a las exportaciones. El exdecano de la Facultad de Agronomía
de la UBA no supo qué responder, y les pidió "paciencia" porque "si
bien yo estoy de acuerdo, esa es una respuesta que tiene que dar el
Ministro". La respuesta del ministro, que es Caputo, es un no rotundo,
al menos por el momento. Es que el jefe de Hacienda suele decirles a
todos sus súbditos recientes que en el paquete de leyes que Milei quiere
derogar está la baja de la cuarta categoría del Impuesto a las
Ganancias, una política que transformó en ley el ministro de Economía
Sergio Massa. Entonces, si saca Ganancias y alguna otra tasa, tiene que
tener algún ancla de ingresos, por eso quedarán las retenciones.
Dos nombres para AFIP, organismo clave
Hay
organismos clave, que dependen de Hacienda, y no están definidos. El
más importante es AFIP, donde Milei se debate entre dos nombres y un
problema: nadie quiere agarrar porque saben que la política de ajuste se
verá reflejada en números muy malos de recaudación.
Los dos nombres
en danza son los de abogado laboralista Liban Kusa y el economista
Darío Epstein, que está desde el inicio en LLA y no le han dado aún
lugar. Epstein estaría en condiciones "de agarrar cualquier cargo",
según afirman los que lo frecuentan. El caso de Kusa es diferente.
Director
del departamento de Impuestos del Estudio de Abogados Brouchou &
Funes de Rioja, no está seguro de tomar el desafío porque "no quiere
lidiar con la política". De concretarse, sería una designación polémica:
el buffet del titular de la Unión Industrial tiene 152 letrados, es uno
de los más grandes del país y representa, mayoritariamente, a las
empresas alimenticias, que ahora se relamen por precios libres.