Las decisiones del BCRA impactan de lleno sobre los depósitos de los
ahorristas. La tasa de los plazos fijos será del 110% para todos los
clientes. Hasta este lunes, un depósito a 30 días mayor a 30 millones
tenía una tasa mínima de 133%, en tanto la taza para depósitos
minoristas se ubicaba en un 126% promedio. Ahora los plazos fijos corren
por debajo de la infalción y esto explica la renovada presión sobre el
dólar.
"Al centralizar sus operaciones en un solo instrumento, y al
ser su tasa de política la única tasa de interés de referencia, se busca
hacer más clara la señal de política monetaria y fortalecer su
transmisión al resto de las tasas de interés de la economía", dijo el
Central. En lo concreto se trata de reemplazar un papel de deuda del
Central con vencimiento a 28 días, por otro emitido por la misma
institución con vencimiento a un día, lo que deja mucho más exigida a la
entidad monetaria. Pero se trataría del primer paso de una jugada más
compleja: reemplazar la deuda del Banco Central por una del Tesoro, que
el mercado ve como de menor calidad y de ahi las dudas sobre la solidez
del respaldo de los ahorros. El gobierno apunta a que la liquidez de las
leliq se vuelve finalmente a letras del tesoro para financiar el
déficit fiscal. Por eso amplia la cantidad de títulos que puede tener
cada banco.
Es que en paralelo al cambio de título, el Banco Central
amplió el monto máximo de tenencia en títulos públicos. "El gobierno
apunta a que esa liquidez se vuelve finalmente a letras del tesoro para
financiar el deéficit fiscal. Por eso amplia la cantidad de títulos que
puede tener cada banco", explicó a LPO un operador del mercado. "No solo
es el fin de las leliqs, sino es que el requiem para los plazos fijos",
dijo a LPO otro economista.
El dato es que un rato antes de
comunicar el fin de las leliqs, el BCRA emitió otro comunicado para
habilitar a los bancos a ampliar su tenencia de deuda pública. Advierten
que la decisión de cambiar leliqs por bonos del Tesoro aumenta el
riesgo de un plan Bonex Ahora los bancos pueden tener más bonos en
cartera que lo que les permitía hasta ahora. El riesgo es que esa mayor
tenencia de títulos públicos se compensa con una porción menor de
encajes no remunerados.