El Gobierno mandó a cerrar los Centros de Referencia del exMinisterio de Desarrollo Social. La motosierra deja en la calle a 600 trabajadores de Capital Humano. La medida afecta a las oficinas descentralizadas que la cartera social tenía en varias provincias, a través de la cuales se implementaban los programas de asistencia a nivel federal. La ministra Pettovello justificó los despidos y acusó a los empleados de "ñoquis". "Solo demuestra un profundo desconocimiento del trabajo que se venía haciendo", respondieron desde ATE Capital. El recorte se extendió también al Potenciar Trabajo. Por Matías Ferrari
Los CDR eran la pata territorial del exministerio de Desarrollo Social en todo el país.
El único ministerio que según prometió Javier Milei iba a contar con
"la billetera abierta para contener a los caídos” es paradójicamente el
que está encabezando el proceso de desguace, ajuste y despidos en el
Estado. La cartera de Capital Humano que conduce Sandra Pettovello
anunció este lunes el cierre de los 59 Centros de Referencia (CDR) con
que contaba la Secretaría de Niñez y Familia (ex Desarrollo Social) en
todo el país, con el correspondiente cese de los contratos de unos 600
empleados. La medida fue anunciada vía redes sociales: ésa fue la forma
—un posteo en Twitter— en que los trabajadores y las trabajadoras, y
hasta los propios delegados gremiales, se enteraron que se quedaban en
la calle.
La cartera que conduce Pettovello comunicó el cierre y los
despidos como una buena noticia. Los CDR “funcionaban como cajas de la
política y refugios de ñoquis”, dice el comunicado oficial de Capital
Humano, a tono con la forma despectiva en que el Gobierno se refirió a
los trabajadores de la Agencia Télam, el INADI y otros organismos. “De
esta manera, se ahorrarán 5.000 millones de pesos anuales”, agrega. La
ministra utilizó los mismos argumentos, también este lunes, para
justificar la eliminación de las “unidades de gestión” del Potenciar
Trabajo, que eran administradas por las cooperativas y emprendimientos
productivos de las organizaciones sociales. El ajuste en el principal
programa de asistencia social del país, se vanaglorió Pettovello, suma
otros “34 millones de dólares al año”.
Abandono de territorio- Lejos
de ser un “refugio de ñoquis”, los CDR constituían la pata territorial y
federal del exMinisterio de Desarrollo Social, hoy degradado a
secretaría. Con sedes en el interior de la Provincia de Buenos Aires
(Bahía Blanca, Mar del Plata, Mercedes, Tandil, Dolores, etc), y en casi
todas las provincias del país (desde Formosa, Chaco y Corrientes hasta
Chubut, Río Negro y Santa Cruz), los Centros atendían a diario trámites
para acceder a distintas políticas públicas que de otra forma sólo se
podrían hacer en la Ciudad de Buenos Aires: desde conseguir un
Certificado Único de Discapacidad o el Monotributo Social hasta tramitar
los medicamentos biomédicos de alto costo que entregaba la Dirección de
Asistencia Directa por Situaciones Especiales (DADSE) que, por otra
parte también fue desfinanciada por el gobierno libertario.