No hay plata pero "va a haber en el segundo semestre", ironizó. Francos, vuelo a dos provincias en un día y frenéticas negociaciones por las Bases. El ministro del Interior necesita resolver puntos álgidos de la Ley Bases y el paquete fiscal que aún discute los gobernadores como Ganancias, reforma laboral, desregulación del tabaco, privatizaciones e hidrocarburos. Estuvo en Santa Fe con Pullaro, Llaryora y Frigerio y luego voló a Santiago del Estero para reunirse con Zamora. Casa Rosada promete enviar hoy el paquete fiscal al Congreso. Por Melisa Molina- La semana pasada en los pasillos de Casa Rosada se decía que la ronda de reuniones entre el gobierno nacional, los gobernadores y los diputados aliados había culminado y que, una vez enviado a todos ellos el borrador de la nueva ley bases y del pacto fiscal, esta semana ambos proyectos comenzarían a ser tratados en comisiones.
Por ahora eso no ocurrió porque hay puntos álgidos en ambos proyectos
que no terminan de convencer a los bloques amigables y a algunos
gobernadores. Entre ellos hacen ruido partes de la reforma laboral, del
regreso del impuesto a las ganancias, de los RIGI, de lo vinculado a las
no regulaciones a la industria del tabaco, a privatizaciones y a lo
vinculado a hidrocarburos. Según explican en Balcarce 50 el envío del
paquete fiscal al Congreso se concretaría hoy miércoles y, una vez que
eso ocurra, deberán ser convocadas las comisiones. El objetivo del
oficialismo sigue siendo tener las dos leyes aprobadas antes del pacto
del 25 de Mayo, pero aceptan que es muy posible que todo se atrase. Las
reuniones, en tanto, siguen a ritmo frenético. El ministro del Interior
Guillermo Francos estuvo este martes por la mañana con el gobernador de
Santa Cruz Claudio Vidal --que, según dicen en su entorno, no acompañará
las leyes--, por la tarde viajó a Santa Fe, donde compartió un
encuentro con los gobernadores de la zona centro y, por la noche, voló a
Santiago del Estero, donde se reunió en la casa de gobierno de esa
provincia con Gerardo Zamora, un actor clave en lo que puede llegar a
pasar con ambas leyes en el Senado de la Nación. Este miércoles, en
tanto, el ministro se reunirá 11.30 en Casa Rosada con los diputados del
bloque Innovación Federal, que representan a los legisladores de
diversas provincias y cuyos votos también serán centrales.
Francos,
agotado, se sinceró sobre el escenario que compartió durante la tarde
con los gobernadores de Santa Fe Maximiliano Pullaro, de Córdoba Martín
Llaryora y de Entre Ríos Rogelio Frigerio. "No saben lo que es lidiar
con esta gente como ministro del Interior sin plata. Lo sufro mucho",
dijo jocoso. Los gobernadores en el escenario también largaron una
carcajada.
Luego siguió: "me gustaría que pudiera la nación
acompañar a los reclamos de las provincias, pero más allá de las
intencionalidades políticas y de los principios que están en la
Constitución, nos encontramos con la realidad de un estado devastado e
imposibilitado de cumplir con las funciones más esenciales". "Hay que
empezar por lo primero, que es poner la casa, o algunos dicen 'la caja',
en orden", disparó parafraseando al expresidente Raúl Alfonsín.
Pero
no se quedó ahí, el ministro unió otras dos frases icónicas de
presidentes y expresidentes: una de Milei y otra de Mauricio Macri. "Por
ahora no hay plata", empezó citando al "libertario", y luego siguió:
"Pero ya va a haber porque estamos estabilizando la situación económica
macro y estamos convencidos de que, a partir del segundo semestre del
año, la economía va a rebotar y podremos comenzar a conversar de otro
tipo de cosas". Macri había dicho algo similar en marzo de 2016 cuando
expresó que “en el segundo semestre se irá resolviendo el problema de la
inflación".
Los gobernadores de la "zona centro", fueron, en gran
parte, condescendientes con el gobierno. Frigerio dijo: "No hay plata,
como dice el Presidente. El esfuerzo de austeridad es también de las
provincias. Apuesto a que el gobierno tenga éxito, por eso estamos
ayudando a construir gobernabilidad y que el Presidente pueda tener las
herramientas que está pidiendo hace tiempo. Apuesto que en los próximos
meses la caída de la actividad toque fondo y volvamos a crecer".
Llaryora añadió que estaba de acuerdo con el Pacto de Mayo y destacó el
proyecto nuevo de la Ley bases.
Pullaro fue el más reticente. Señaló
que "la oportunidad de Argentina de salir adelante no pasa solamente
por el ajuste y por el sector financiero sino por la generación de
empleo y crecimiento”. En los últimos días el gobernador también dijo no
estar conforme con partes del Régimen de Incentivo para Grandes
Inversiones (RIGI) que está dentro de la ley Bases porque, opina, supone
un peligro para la industria de su provincia.
El gobernador de Santa
Cruz tampoco estaría de acuerdo con esa parte de la ley ni con lo
vinculado a hidrocarburos y a la privatización de YCRT. Según cuentan
desde la gobernación, Vidal le dijo a Francos que no solo no la quiere
privatizar sino que "no quiere ningún despido". "No cuentan con los
votos de Santa Cruz", dicen cerca del gobernador. En diputados hay dos
legisladores que responden a Vidal y en el Senado un par más. Otro punto
en tensión con los gobernadores patagónicos es el del impuesto a las
ganancias. En esa zona no estarían conformes con el 1.8 de piso que
pusieron desde el gobierno.
Además, hay ruido con la reforma laboral
que presentaron los radicales encabezados por el diputado y presidente
del bloque, Rodrigo de Loredo. Allí ellos sostuvieron el artículo que
eliminaría las contribuciones obligatorias emanadas de los convenios
colectivos conocidas como "contribuciones de solidaridad". Y eso
volvería a generar conflicto con los sindicatos. "Eso se va a sacar en
el trabajo de comisión y no va a formar parte del dictamen", dicen desde
Casa Rosada. El tema no solo generó tensión con los libertarios, sino
también dentro del propio bloque de la UCR con el sector que lidera
Facundo Manes, que no está de acuerdo con la reforma que presentó de
Loredo. Por último, genera problemas la desregulación de la industria
tabacalera. En la primera versión de la ley había regulaciones para el
sector, que en esta habrían sido eliminadas por el lobby empresarial.