No había nada malo", recalcó Adorni. "Notó que eso podía prestar a la
confusión a alguna parte de la audiencia y decidió cortar la nota",
contó. Santiago Caputo obligó a Jony Viale a borrar una pregunta para
que Milei no tenga problemas en la Justicia. Adorni buscó dejar en claro
que el propio Milei cuestionó al asesor. "Cuando terminó la nota el
presidente le dijo 'Santiago esto fue innecesario'", reveló el contador.
"Santiago habitualmente no está en las notas, entonces tal vez no sabe
que la dinámica es no cortar las notas por ningún aspecto, absolutamente
por nada", insistió. "Se cometió un error técnico y nada más, por un
tecnicismo de justicia que el presidente no tiene por qué conocer. Yo no
lo hubiese cortado", completó Adorni, que además aseguró que "jamás
Milei permitiría una preguntar armada, dictada o guionada". La jugada de
Karina contra Santiago es parte de la guerra fría en el "triángulo de
hierro", que se vio con claridad en el cierre de listas en Santa Fe
donde la hermana desplazó completamente al asesor, como contó LPO. Es
cada vez más evidente que Karina busca que el Triángulo de Hierro adopte
otra configuración geométrica y se convierta en un dígono, que está
formado por dos arcos de círculo máximo que comparten dos puntos
extremos, en este caso serían los hermanos. La filtración del crudo de
la entrevista que reveló que mostró la interrupción por parte de Caputo
detonó el plan de la Rosada para tratar de cerrar el escándalo de la
estafa cripto y dejó en evidencia de manera brutal el funcionamiento del
gobierno.
En el tramo cortado Milei reconocía abiertamente que
utilizaría a Mariano Cúneo Libarona y el Ministerio de Justicia para su
defensa personal en el caso, en una confusión más de lo estatal y lo
personal. "Entiendo, me doy cuenta, puede traer un quilombo judicial",
le dice Jony Viale a Caputo tras la irrupción. Luego Milei le recomienda
que le vuelva a preguntar por el escándalo de $Libra. El episodio deja
también en evidencia el problema del gobierno de apostar a dar
explicaciones en una entrevista con un periodista amigo y no en una
conferencia de prensa donde el presidente podría confrontar preguntas
más incómodas